Situado en el barrio Plantage, al este de Amsterdam, en un imponente edificio construido en 1616 que fuera Depósito Naval Nacional, el Museo Marítimo narra exhaustivamente la historia de la navegación holandesa.

El primer piso del museo muestra los orígenes y el desarrollo de la flota holandesa en el siglo XVII, llamado Siglo de Oro, de la mano de la Compañía de las Indias Orientales Holandesas, mientras que el segundo está dedicado a la navegación mercantil, desarrollada en el siglo XIX.

Las colecciones del museo abarcan, porsupuesto, toda clase de instrumentos de navegación, mapas, réplicas de barcos, tableros, etc. Entre las curiosidades y atracciones especiales con que cuenta el museo se encuentra una copia de la primera edición de la obra de Maximilianus Transylvanus, De Moluccis Insulis, la primera en describir el viaje de Fernando de Magallanes alrededor del mundo.
El museo guarda, además, valiosos mapas realizados por el prestigioso cartógrafo Willem Blaeu y su hijo que datan del siglo XVII y numerosos retratos de oficiales y cuadros con escenas de batallas navales, como la batalla de Gibraltar librada contra los españoles, obra realizada en 1622 por Cornelis Claesz.

El conocimiento del movimiento de los astros jugaba un rol de vital importancia para la navegación. El museo conserva un planetario de Jan van Dam; aunque data de 1750, este modelo reducido que reproduce el movimiento de los planetas del sistema solar aún funciona...
Otra de las piezas valiosas que atrapa la atención de los visitantes es la chalupa real, una lujosa embarcación construida en 1818 para el rey Guillermo I, en la cual la familia real solía transportarse por los canales en ocasiones especiales.

Frente al museo se encuentra amarrado el navío 'Amsterdam', una réplica exacta de una nave de tres mástiles del siglo XVIII construida con considerable esfuerzo en 1985 según documentación y dibujos existentes. Parte de la embarcación está dedicada a museo y ambientada como en la época y un grupo de actores vistiendo como los marineros de entonces representa escenas simulando a la tripulación. Es, sin ninguna duda, la gran atracción del museo.